Crónica del Baloncesto Armijo Badajoz - Femenino Cáceres

Según el Diario Hoy:

El Femenino Cáceres pudo con el Armijo en un gran derbi
Las cacereñas fueron siempre por delante en el marcador
REDACCIÓN/BADAJOZ

El Armijo Badajoz no pudo con el Femenino Cáceres en un partido muy igualado. No defraudó a las previsiones el derbi disputado el pasado domingo en La Granadilla entre los dos equipos extremeños de la Liga Femenina 2. Un numeroso público acudió al pabellón pacense y no dejó de animar a las locales hasta el último segundo.

El Armijo comenzó el choque muy nervioso, sobre todo en defensa, lo que aprovechó el Cáceres para poner distancia en el marcador con un parcial de 2-7, lo que hizo que las locales fueran a remolque durante todo el cuarto, que termino con un apretado 12-15.

Los siguientes diez minutos, predominaron las defensas sobre los ataques y las fuerzas se igualaron. Hay que destacar en este período a la local Mª Bel López y a las jugadores visitantes Eckart y Kook. Al descanso se llegó con un apretado 30-31 para las cacereñas.

El tercer cuarto fue el peor jugado por el Armijo, que defendió bien pero actuó muy precipitado en ataque. El Cáceres alcanzó una renta de 10 puntos que se quedó en siete al final del tercer cuarto, gracias a una canasta con tiro adicional convertida por Gisela Vega en los últimos segundos.

En el último cuarto el Armijo enjugó la diferencia, permitiendo solo tres canastas en juego del Femenino Cáceres. Pero las visitantes estuvieron muy acertadas en las innumerables veces que acudieron a la linea de tiros libres y eso marcó el desenlace del partido.

A falta de 50 segundos Ana Hogg tuvo en sus manos el empate pero su triple lo escupió el aro. Al final, 62-66 para las cacereñas que siempre fueron por delante en el marcador ante un Armijo perjudicado por la rigurosidad de alguna decisión arbitral.

Mejor equipo el Femenino Cáceres en mi opinión. Detalle bastante feo del entrenador local buscar la técnica para poder echar la culpa de la (posible a falta de 2 minutos) derrota a los árbitros, no está bien eso, Fernando, pero cada uno sabe sus armas.